Carrasco: "Los vecinos de Bovar, la Molinera y Senillar solo piden recuperar la normalidad de antes. Tampoco entienden por qué los motores para desaguar no se activan cuando se necesita."

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La portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, volverá a llevar al Pleno, el próximo jueves, la voz de más de 1.600 vecinos que piden soluciones a las inundaciones de sus parcelas en la Marjalería por la rotura de una tubería que lleva más de dos años sin repararse.

El 29 de abril de 2021, el Partido Popular llevó a debate al Pleno una moción con el fin de que el el gobierno municipal activara medidas urgentes para la dignificación y solución a los problemas de inundaciones que se dan en la zona de Bovar, Senillar y Molinera de la Marjalería. Y lo hizo presentando más de 300 firmas que habían recogido los afectados.

Un año después, "la situación de inundación no solo no ha mejorado o se ha solucionado, sino que ha empeorado. Si el nivel freático de las aguas subterráneas ya era alto durante todo el invierno, las intensas lluvias caídas durante la semana de Magdalena y fechas posteriores, solo han hecho que agravar la problemática. La tubería sigue sin arreglarse por inacción del gobierno municipal, a pesar de que tiene competencias y, por tanto, puede y debe buscar soluciones de manera conjunta con la Diputación y el Coto Arrocero, que son también competentes. Solo este último ha aportado una medida paliativa temporal para la evacuación del agua, pero urge una solución definitiva", explica Carrasco.

"El agua estancada es una amenaza para los cultivos y la proliferación de mosquitos, que el verano pasado supuso un problema de salud pública. El jueves volveremos a instar al equipo de gobierno en el Pleno a reparar el colector general; a instalar una estación de bombeo en la zona de Bovar, que es el punto más bajo de la Marjalería, y a revisar los protocolos de actuación de las estaciones de bombeo"

Y añade: "La agrupación de propietarios de la zona ha vuelto a remitir, por Registro Oficial al Ayuntamiento,más de 1.600 firmas, que también nos han entregado a nosotros, reiterando su petición de que el Ayuntamiento tome todas las medidas administrativas, jurídicas, técnicas y políticas necesarias para revertir la situación y recuperar la normalidad de antes de la rotura de la tubería, cuyo arreglo han llegado a cuantificar en torno a los 200.000 euros".

"Hace un año ya elevamos su problemática al Pleno debido a la rotura de la tubería central que evacuaba el agua. Hoy la tubería sigue sin repararse y las parcelas inundadas por inacción del gobierno municipal, a pesar de que tiene competencias y, por tanto, puede y debe buscar soluciones de manera conjunta con la Diputación y el Coto Arrocero. Solo este último ha aportado una medida paliativa temporal para la evacuación del agua"

Los mismos vecinos afectados tampoco entienden por qué los motores para desaguar no se activan cuando la situación lo requiere. "El agua estancada es una amenaza para los cultivos y para la proliferación de mosquitos, recordemos que el verano pasado supuso un problema de salud pública. Por todo ello vamos a volver a solicitar en sede plenaria que se repare el colector general, que se instale una estación de bombeo en la zona de Bovar, que es el punto más bajo de la Marjalería y que se revisen los protocolos de actuación de las estaciones de bombeo", aclara.

El Coto Arrocero aportó en su momento una solución temporal, colocando una pequeña bomba de diésel para extraer agua, pero se trata de una solución insuficiente, puesto que la capacidad de extracción del dispositivo no llega a rebajar el nivel de las aguas, a pesar de estar en funcionamiento los 365 días del año.

"Para nosotros, que nos hemos reunido con los vecinos siempre que nos lo han pedido y hemos visitado la zona constantemente, ésta debe ser una prioridad a atender por parte del gobierno municipal. Son castellonenses que, igual que otros, pagan sus impuestos y merecen servicios que funcionen, no que los problemas que provoca una tubería rota se enquisten el tiempo por absoluta falta de interés a la hora de buscar soluciones. No entendemos esta falta de empatía con quienes tienen sus propiedades inundadas y están desesperados porque el gobierno municipal sigue sin hacer nada", concluye Carrasco.