Carrasco ha recordado que en septiembre de 2016 el propio equipo de gobierno encargó al Colegio Oficial de Enfermeros de Castellón un estudio que costó 16.000 euros para analizar la idoneidad o no de esta implantación

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La portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, ha valorado el hecho de que el conceller de Educación, Vicent Marzà, abra ahora las puertas a los ayuntamientos para promover la implantación de la enfermera escolar en los centros educativos. Y, al respecto, ha expresado su "confianza" en que la alcaldesa de la ciudad, Amparo Marco, "no ponga más excusas y, ahora que el conseller lo deja en manos de los ayuntamientos, promueva la implantación de este servicio en nuestra ciudad".

Carrasco, ha recordado que "se trata de una figura que ha sido especialmente reclamada desde hace años tanto por el sector docente como por las propias familias y organizaciones como el Colegio Oficial de Enfermeros y que fue incluso una promesa electoral de Amparo Marco en el año 2015, por lo que pedimos a la alcaldesa de Castellón que recapacite y contribuya a implantar este servicio".

En concreto, la portavoz del Grupo Municipal Popular ha recordado que en septiembre de 2016 "el propio equipo de gobierno encargó al Colegio Oficial de Enfermeros de Castellón un estudio que costó 16.000 euros para analizar la idoneidad o no de esta implantación. Un informe que destacó en sus conclusiones la necesidad que los centros escolares de nuestra ciudad contaran con ese servicio, que se lleva demandando sin éxito desde hace años, debido a las numerosas trabas de carácter político que se han puesto desde el primer momento a su puesta en marcha definitiva".

"Estamos inmersos en plena segunda ola de la pandemia y, en estos momentos, el mejor modo que disponen los centros de minimizar los posibles riesgos de contagio y agilizar la gestión de casos sospechosos es poder contar con personal cualificado en los propios centros educativos", ha indicado Carrasco.

La portavoz municipal del PP ha recalcado además que "ahora se trata de una mera cuestión de voluntad política, ya que el Consell ha dejado claro que por su parte no se implantará un programa específico al respecto, sino que la implantación de la enfermera escolar dependerá de los consistorios, que serán quienes deberán permitir que los profesionales sanitarios trabajen en las escuelas, siempre que su acceso a este tipo de instalaciones esté regulado, cuenten con visto bueno de la comunidad educativa y se garantice la seguridad en materia sanitaria".

"Pedimos a Amparo Marco que recapacite y que escuche las necesidades de una comunidad educativa a la que ella misma prometió en 2015  la implantación de este mismo servicio; un servicio que, cinco años después, sigue a la espera de incorporarse a los centros", ha indicado Carrasco, que ha recalcado que "nos encontramos ante una situación extraordinaria que necesita medidas extraordinarias y soluciones urgentes que contribuyan a garantizar una atención sanitaria rápida y eficaz a la ciudadanía, especialmente cuanto se trata de los colectivos más sensibles, como es el caso de la comunidad escolar, ya que no podemos depender únicamente de derivar al alumnado a los centros de salud de referencia, en muchos casos saturados, como el de Palleter, o en otros incluso cerrados desde el pasado verano, como el de Benadresa".