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Momento de adhesión

Autor: Maria Nieves Martínez Tarazona, Vicesecretaría de Política Autonómica PP Castellón

Tras el verano parecía que el pueblo valenciano empezaba a entender los motivos por los cuales nuestra situación era distinta a la de otros territorios de nuestro país. El informe de expertos presentado en el Parlamento Valenciano avalaba el porqué de nuestra situación y parecía un punto de partida a una nueva etapa. Tras el cuórum inicial, los partidos de la oposición no le han visto mayor redito político al mismo, y alentados por sus primarias internas de cara los próximos comicios, han decidido anteponer los intereses de las siglas y de personalismos en rivalidades internas, al interés de cinco millones de valencianos y valencianas.

Ayer leía en las líneas de este mismo periódico las críticas hacia el presidente Fabra por no ir a Madrid para decir “así no puedo continuar siendo presidente de esa comunidad”. Cuál mi sorpresa al leer esto. Por muy catedrático que se sea hay que ser consciente de lo que supondría al pueblo valenciano haber sido intervenido por Madrid y en contrapunto la valentía que supone que alguien como el Presidente Fabra haya asumido las riendas de nuestra Comunidad y tenga una constante lucha en cada uno de sus encuentros por esta tierra y sus gentes, sin necesidad de ser portada de periódico por ello, ya que es su trabajo primordial, velar por el presente y futuro de los habitantes de esta Comunidad.

La semana pasada tuvo lugar un acto con la sociedad civil de Acuerdo de Adhesión a una serie de puntos que no son más que el reflejo de las necesidades de nuestra tierra. En contra de lo que tanto la oposición como los medios maliciosamente han trasladado al resto de valencianos y valencianas no se trataba de un acto más. La oposición hizo mal en no adherirse a los allí representados, pues las sensibilidades que allí estuvieron eran bien variadas, y es que los acuerdos allí reflejados transcienden a esta legislatura y las siguientes, transcienden a los gobiernos de cualquier color. Eran la suma de lo que la sociedad valenciana necesita ahora y en un futuro: Por supuesto, y en primer lugar, el hecho de una financiación adecuada, base como se ha demostrado en el citado informe de expertos para solvencia de nuestros servicios esenciales. Como no, el Corredor Mediterráneo y lo que ello supone en cuanto a competitividad y productividad de nuestras empresas e industria. No sin olvidar la base de nuestra tierra: la agricultura. Necesitamos de recursos hídricos suficientes porque sin ellos nuestra agricultura no podrá crecer. Asimismo, por nuestro turismo. Industria, agricultura y turismo son la base de algo que para todos es el objetivo principal: el empleo. Y por supuesto por una sociedad que vele por sus sectores más desfavorecidos y que ofrezca al exterior una imagen real y potente de nuestra tierra, sin ella la Comunidad Valenciana no generará confianza y la confianza es la base de todo.

Al tripartito, cuyo objetivo es el corto plazo, les pediría reflexión y alto de miras. La sociedad pide a los políticos trabajar más allá de las próximas elecciones. Este era un buen momento para haber demostrado el cambio de la clase política, ya que este acuerdo está por encima de cualquier sigla, se trata de un acuerdo de todos y para todos. Oía en un noticiario la semana pasada en boca de Ximo Puig: “La demagogia barata sólo conduce a un populismo barato”. Así pues, les diría al tripartito que si éste ha de ser su líder que reflexionen, ya que la sociedad no está para populismos baratos y sí para afrontar realidades.

 

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