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Los alcaldes se deben antes a sus vecinos que a sus siglas

Autor: Francisco Juan Mars, alcalde de Alcalà de Xivert

El espectáculo tan poco gratificante con el que nos obsequiaron el martes los alcaldes socialistas que acudieron a la II Cumbre de Alcaldes convocada por la Diputación de Castellón ha dejado grandes damnificados.

Pero no es el presidente de la Diputación, Javier Moliner, que accedió a convocar el acto a propuesta del propio PSOE para responder a pecho descubierto a las preguntas de los 135 alcaldes de la provincia.

Ni fuimos los alcaldes del PP, junto con el de Compromís, los independientes y la socialista de Alqueries, que nos quedamos para hacer nuestro trabajo en defensa de nuestros municipios.

Ni fueron los medios de comunicación, que se vieron desbordados, entrando y saliendo a la carrera del Salón de Recepciones de la Diputación para hacer su trabajo.

Los grandes perjudicados fueron los vecinos de Vila-real, Cervera, Forcall y de hasta veintitantos municipios ‘malgobernados’ por el PSOE, ya que sus alcaldes prefirieron dar la espantada a la llamada de Adolf Sanmartín –ni siquiera Francesc Colomer tiene arrestos para liderar la pseudorevuelta-.

Porque mientras la Diputación sabrá qué necesidades tienen los vecinos de los ayuntamientos del PP, de Compromís, los independientes y de Alqueries, para atenderlas, los de los ayuntamientos del PSOE no tuvieron alcalde que les defendiera. Y es que los alcaldes nos debemos antes a nuestros vecinos a las siglas.

 

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