Este sitio web utiliza cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y optimizar su navegación. Si continua navegando, consideramos que acepta nuestra política de cookies

Alcalde Bataller

Autor: Javier Moliner Gargallo, Presidente de la Diputación de Castellón

Cerramos hoy una semana inolvidable en lo institucional y político, pero para mí mucho más en lo personal. Un gran político, una gran persona y un gran amigo asumía el jueves la presidencia de la Generalitat; y un gran político, una gran persona y un gran amigo asumía ayer la alcaldía de Castellón.

Alfonso Bataller es el nuevo alcalde de nuestra capital y esa es una gran noticia para todos los castellonenses. No conozco a mucha gente con la capacidad de trabajo, con la inteligencia, la discreción, la empatía y la cercanía de Alfonso.

Estamos en un momento complicado tanto económica como socialmente, y por eso entiendo que es el momento en que las personas más capacitadas ocupen los puestos de máxima responsabilidad. Y desde esa óptica, la elección de Bataller es todo un acierto.

Se equivocan los que piensan que llega de rebote. Es una decisión totalmente premeditada desde hace tiempo y de la que ya hace meses estábamos todos convencidos. No es casualidad que Alfonso dejara su cargo de responsabilidad al frente de la sanidad valenciana para acudir a la llamada de la máxima institución de la ciudad que le vio nacer y en la que ha vivido toda su vida.

Es tiempo de gestión. No es momento de políticos palabreros y oportunistas. Es momento de gestores serios, rigurosos y sensatos.

Alfonso lleva ya 16 años con cargo de responsabilidad en la gestión, manejando con eficacia presupuestos de centenares de millones de euros en la administración pública. A esto se une un sentimiento de castellonero fuera de toda duda, que sin duda impregnará su gestión municipal.

Esa cualidad guiará el camino del éxito. Hablar con los vecinos, conocer sus inquietudes, analizar sus problemas y tomar las decisiones para resolverlos. Ese será su trabajo. Si de algo se puede acusar a mi alcalde es de ser buena persona, algo que para mí es la esencia del buen político. Y Alberto Fabra es un claro ejemplo. Alfonso, como yo, hemos aprendido en la misma escuela.

A esto hay que sumar su acreditada capacidad de lucha por conseguir lo mejor para su ciudad. Gracias a él, hoy Castellón tiene tres nuevos centros de salud y un consultorio y esa capacidad reivindicativa seguirá siendo línea maestra de su acción política.

Desde ayer Castellón tiene a un gran alcalde. La humildad, la cercanía, la gestión, el rigor y la ambición de conseguir lo mejor para los castellonenses han sido siempre los valores que han guiado la vida pública y personal de Alfonso. Y yo los comparto, los apoyo y los admiro.

Conozco bien el Ayuntamiento de Castellón y conozco bien a Alfonso Bataller. Créanme, ayer, en Castellón, empezó el mandato de un alcalde para la historia.

 

Opiniones deja tu opinionDeja tu Opinión
No existen opiniones para este elemento.

Arriba OpiniónOpinión Enviar a un amigoEnviar a un amigo Volver AtrásVolver Atrás