Paradoja

Autor: Rubén Ibáñez Bordonau. Diputado Corts Valencianes

Un vecino me hacia una reflexión sobre la actitud de los diferentes partidos políticos ante un mismo hecho: Un ciudadano pidiendo en las escalinatas de una iglesia con un cartel que dice “necesito una ayuda para comer”.

Este hecho, que desgraciadamente no nos es ajeno, puede ser tratado de diferente forma según la óptica de un partido político u otro. Así, me contaba mi vecino, que ante esa situación, la actitud de un representante de Izquierda Unida sería la de sentarse a su lado, desplegar una pancarta que rezara “frente a la opresión la revolución” y darle un silbato al ciudadano para que protestara. La realidad es que la pancarta anulaba el mensaje que él tenia y que el ruido del pito ahuyentaba a las personas que se querían acercar.

El representante de Compromis, después de explicarle que el País Valencià esta en quiebra, le pondría una camiseta con el lema de “Fabra dimissió” y “Rtvv tornarà”. Pasado el rato, se dio cuenta que el mensaje de su camiseta  era incongruente con el de su petición y que en nada le solucionaba su situación. La actitud del representante socialista fue más ilusionante y le aseguró que si ellos gobernaban, tendría una casa y medios para vivir. Sin embargo esto no convenció a nuestro ciudadano, por cuanto él había perdido su casa y su trabajo bajo un gobierno socialista.

Por último el representante del PP, se acercó lo cogió de la mano y se lo llevo, tras un largo camino, donde nuestro ciudadano llego a maldecir el hecho de haberse ido por que no llegaba a ningún sitio, se dio cuenta de que finalmente llego a un centro, donde le atendieron, le dieron de comer, y le orientaron para ayudarle a salir de esa situación. Por fin había tenido respuesta a su necesidad, aunque le toco andar, y tuvo serias dudas de adonde se dirigía. La protesta, el ruido o las falsas ilusiones nunca son la solución.

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