Redondo: "Desde el PP queremos reducir la presión fiscal a los ciudadanos, las pymes y autónomos"

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El concejal del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Juan Carlos Redondo, ha anunciado que el PP presentará una propuesta para activar una bajada selectiva de impuestos en la ciudad, pensando especialmente en aquellos tributos cuya disminución pueda contribuir de manera significativa a favorecer la creación de empleo y a combatir los efectos de la crisis económica y social ocasionada por la COVID-19.

Redondo ha explicado que "la ciudadanía de Castellón necesita de manera urgente una bajada de impuestos en una ciudad donde el desempleo roza las 17.000 personas., cifra a la que también hay que sumar la de los ERTE, y en la que los presupuestos han llegado tarde y mal resulta fundamental que desde las administraciones se arbitren medidas para aliviar la presión fiscal sobre la ciudadanía y favorecer la reactivación económica y empresarial".

"Es por ello que desde el PP hemos empezado a trabajar en una una serie de propuestas en esta línea, de manera que en los próximos días podamos presentarlas también ante la Mesa Negociadora, que se ha convocado por primera vez desde hace más de un año a instancia de la solicitud que presentamos a principios del mes de julio para revisar el IBI de las empresas que operan en el Puerto de Castellón", ha añadido.

Como primer paso en este sentido, ha avanzado que "ya hemos elevado a la Mesa Negociadora de las Ordenanzas Fiscales de Castellón una propuesta para solicitar que impuestos como el IBI para los Bienes Inmuebles de Características Especiales (BICE) vuelvan a niveles previos a 2018, propuesta que completaremos en los próximos días con otras iniciativas para reducir la presión fiscal sobre los ciudadanos, las pymes y los autónomos".

El concejal del PP ha recordado al respecto que "en 2017 entró en vigor una revisión del Impuesto de Bienes Inmuebles en la ciudad de Castellón que, en el caso de los contribuyentes del denominado IBI no residencial, supuso para las empresas que tributan al 0,7475% un total de 560.141,61 euros más, mientras que las que las que tienen los valores catastrales más altos, y hablamos de casi 3.200 recibos, pasaron a tributar al 0,85%, lo que implica un total de 50 euros más por recibo".

"Se trata de ayudar a las empresas, las pymes, los autónomos y, en definitiva, a las familias castellonenses a sobrellevar la difícil situación económica y social en la que nos encontramos debido a la pandemia, por lo que pedimos al equipo de gobierno que, siga en esta línea de  sumar esfuerzos, para, todos juntos, salir de esta crisis, algo que no hizo en la confección de los presupuestos aprobados esta semana, a pesar de haberlo anunciado en reiteradas ocasiones", ha incidido Redondo, que ha insistido en que "además de ayudar a los principales sectores productivos con medidas específicas para facilitar que puedan continuar con una actividad económica que se ha visto notablemente ralentizada desde el inicio de la pandemia, se  trata de favorecer la economía local y el empleo y paliar de alguna manera la caída de ingresos que está afectando de manera significativa tanto a las empresas como a las familias".