Un presupuesto para Castellón

Autor: Javier Moliner Gargallo, Presidente de la Diputación de Castellón

Castellón es nuestra única prioridad. Decía José Ortega y Gasset que el liberalismo representa la suprema generosidad por buscar la igualdad entre el fuerte y el débil y el presupuesto que hemos aprobado para el 2019 se enmarca dentro de esta forma de actuar, en el convencimiento pleno de que estas cuentas son las mejores para los 135 municipios de la provincia.

El presupuesto del próximo año asciende a 143,2 millones de euros y pasan de 17 millones a casi 55 de inversión en apenas siete años. Un presupuesto que consolida su modelo de eficiencia en la gestión al triplicar las inversiones de la provincia, con la mayor capacidad inversora de la historia de la Diputación. Y esta inversión beneficia a todos los municipios. En las cuentas del 2019, aprobadas por el equipo de gobierno en un acto de responsabilidad, destaca la capacidad inversora de casi 55 millones de euros, sumando los 35,8 millones de inversiones y los 18 millones de superávit, suponiendo la inversión un 38% del presupuesto. Un presupuesto en el que por primera vez aumentan más las inversiones que el propio presupuesto.

Una de las grandes novedades de este presupuesto es, sin duda, por primera vez en la historia de la Diputación no aparecen gastos financieros. Un presupuesto sin capítulo 3 de gastos, con deuda cero con los bancos y gastos financieros cero.

La gestión eficaz ha permitido que se pase de la deuda acumulada de 140 millones, que generaban unos gastos de 13,5 millones, a cero. Y ese ahorro nos permite incrementar más la inversión que se traduce en mejoras para los municipios.

No descubro nada si recuerdo que soy un defensor a ultranza del modelo liberal de la gestión pública: menos impuestos, menos administración y más servicios para la provincia de Castellón. Tampoco descubro nada si digo que nuestra obsesión es, defender al más débil y a aquellos municipios que más necesidades tienen justamente por sus pocos recursos.

Nuestra labor se ha centrado en equiparar las oportunidades, en conseguir que los más pequeños tengan cada vez más opciones y que todo ello repercuta directamente en los vecinos de cada uno de los 135 municipios. Estos presupuestos mejoran, sin lugar a dudas, las cuentas del resto de años de esta legislatura y, sin embargo, a diferencia del resto de años, la oposición no los ha querido apoyar.

Pese a ello, el equipo del gobierno provincial vamos a mantener la senda del consenso como principal herramienta de trabajo. Seguimos tendiendo la manos y creyendo en valores como el diálogo, el acuerdo y la gestión responsable.

El presupuesto inversor de la Diputación nos consolida como la administración que más invierte directamente en los pueblos de la provincia y multiplica inversiones en aquellas áreas vitales para el progreso de la provincia, como son la sanidad, la seguridad y prevención de emergencias, el turismo y deporte, servicios e infraestructuras como carreteras y depuradoras, fomento del empleo, promoción económica, defensa y puesta en valor del patrimonio, cultura y tradiciones, o el aumento en las partidas de acción social, para hacer una tierra más justa y con mayor calidad de vida para todas las personas.

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