#NoALaReformaDeLledó

Autor: Begoña Carrasco García, Portavoz en el Ayuntamiento de Castellón

En contra de todos. El Gobierno municipal de Castellón se ha propuesto ir en contra de los vecinos de la avenida Lidón y alrededores. Dar un simple paseo por allí basta para estar al tanto de que ninguno de ellos entiende el empecinamiento de la alcaldesa en remodelar uno de los bulevares más amplios y bonitos de nuestra ciudad, con una imagen muy característica que ya forma parte del imaginario de todos los castellonenses, con aceras amplias, con árboles, con una densidad de tráfico baja… en definitiva, una vía que lleva a los vecinos hasta uno de sus rincones más queridos: la basílica de nuestra patrona, la Mare de Déu del Lledó.

Y a pesar de todo eso, Amparo Marco ha decidido que va a meter las máquinas en la calle, a levantar la avenida, a cortar un carril de entrada a la ciudad para los vehículos, a cerrar al tráfico por completo el tramo que queda más cerca de basílica. Es evidente que la alcaldesa no hace gala de su máxima, porque si utilizase sus zapatos y paseara por allí vería lo confortablemente que pasean los castellonenses a diario, cientos de ellos cada día.

Los residentes están en pie de guerra. Y los comercios están en pie de guerra. Y los usuarios de la marjaleria, que usan este acceso para llegar al centro. Y las familias que llevan sus hijos a los colegios de la zona… y así uno tras otro, que se oponen a una reforma que va a costar 3,3 millones de euros y que nadie ha pedido, porque ven más contras que ventajas.

La ciudad está llena de rincones que necesitan esa inversión como agua de mayo. Pero la alcaldesa está en sus trece, erre que erre, que es ahí donde quiere actuar, donde menos se necesita. El proyecto no tiene en cuenta el problema que les va a generar a los residentes para poder acceder a sus plazas de aparcamiento, ni cómo se compensará las pérdidas que van a padecer los comerciantes por el más de un año que van a tener la calle levantada. Ni el colapso que se producirá de vehículos en las calles adyacentes. O cómo está dispuesta borrar de un plumazo una zona verde junto a una guardería para colocar 400 vehículos. Incluso se ha inventado un falso proceso de participación ciudadana para poder decir que el 90% de las peticiones de los vecinos se han tenido en cuenta en el diseño de la reforma de la avenida de Lidón, cuando para empezar la primera petición, la de que no se corte un carril de vehículos, ya no se ha tenido en cuenta.

Desde el Partido Popular vamos a estar al lado de los vecinos. El gobierno municipal nos encontrará en frente si continúa adelante sin escucharlos. El deseo personal de hacerse una foto en esta vía nos va a costar muy caro a todos los castellonenses.

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