Macián: “En 27 años, de 1988 a 2015, no hubo ninguna dimisión. Desde hace 2 asistimos a un derribo continuado de las fiestas por parte de quienes ahora gobiernan”

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El portavoz popular adjunto, Juan José Pérez Macián, lamenta que el intervencionismo y la burocracia del bipartito en la gestión de fiestas haya provocado la reciente dimisión en bloque de 9 miembros de la Junta de Fiestas. Éstas se suman a otras 11 dimisiones anteriores, siendo la primera de ellas la de la concejala socialista Carmen Oliver.

Macián: “Desde que se fundó la Junta de Fiestas en 1988, hasta la llegada del bipartito, nunca se produjo ninguna dimisión en fiestas. Es escandaloso que en apenas 2 años que llevan gobernando, a la alcaldesa Amparo Marco le hayan dimitido 20 personas”.

“Son dimisiones al sistema de gestión de las fiestas impuesto por el gobierno de Amparo Marco, avalado por Compromís, donde los miembros de la Junta de Fiestas no tienen ninguna culpa”.

En dos años, las dimisiones de ciudadanos que tenían ilusión en trabajar por las fiestas de la ciudad, han ido al alza. Una comisión de investigación inquisitorial que criminaliza a los colectivos festeros y con la única intención de acabar con la fórmula de gestión anterior ha agravado la presente situación”, apunta Macián.

“Y no es de extrañar cuando tenemos, por un lado, a dos Reinas de las Fiestas. Estefanía Climent, dignamente y acertadamente elegida, y a una concejala de Fiestas, que cuando se le antoja ejerce como tal, confundiendo su papel. Y por otro lado, a dos Presidentes: a Juanvi Bellido, asumiendo sus responsabilidades al frente de la Junta de Fiestas, y a un gerente que confunde las funciones para las cuales le han traído, llegando a presidir actos como si fuera el Presidente de la Junta de Fiestas”.   

Durante más de dos décadas, de 1988 a 2015, Castellón contó con una estructura consensuada, conocida y aprobada por todos los grupos políticos con representación en el Ayuntamiento, que llevaban a cabo una gestión desburocratizada y despolitizada.

“Ha sido con la llegada del radicalismo de izquierdas, cuando se ha intentado, por todos los medios, generar dudas y romper acuerdos unánimes y de consenso, que hicieron que durante años nuestras Fiestas de la Magdalena vivieran el mayor desarrollo y gozaran de la mayor participación y democracia que ha conocido esta ciudad”.