El 'pacto del gasto' desembolsará 130.000 euros, más de 20 millones de las antiguas pesetas, para organizar actos en las fiestas de la Soledad que arrancan el próximo viernes 6 de octubre.

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El 'pacto del gasto' que gobierna Nules desembolsará 130.000 euros, más de 20 millones de las antiguas pesetas, para organizar actos en las fiestas de la Soledad que arrancan el próximo viernes 6 de octubre. Las celebraciones patronales que "quienes hoy gobiernan cuestionaban, son las mismas a las que hoy el cuatripartito reserva un presupuesto que creemos desorbitado sobre todo si tenemos en cuenta que en Nules hay otras prioridades que urgen soluciones".

Las fiestas de la Soledad se celebrarán entre el 6 y el 15 de octubre. "Queremos estas fiestas y defendemos la tradición, pero en los tiempos que corren hay que reinventarse y racionalizar los recursos". De hecho, son diez días en los que no hay un programa de actividades definido para cada una de las jornadas, sino que se nutre de convocatorias como los Juegos Florales, el 6 de octubre, el día de la Comunidad Valenciana, el 9 de octubre, o el día del Pilar, el 12 de octubre. "Los días 10 y 11 son lectivos para escolares, de modo que al final quedan cuatro días de fiestas", ha explicado Mario García, concejal y portavoz del PP en el Ayuntamiento de Nules.

Para el PP "sería una buena medida que evaluáramos si en estas cuatro jornadas es necesario hacer un desembolso de 130.000 euros como el previsto por el 'pacto del gasto'". Sobre todo "si tenemos en cuenta que en el programa prácticamente no hay actividades para los más pequeños y los jóvenes tampoco tienen convocatorias específicas".

Así las cosas, "creemos que se habría de racionalizar el gasto, porque antes que desembolsar este montante habría que analizar las necesidades básicas de nuestros vecinos que siguen sin resolverse. Es el caso del desempleo, que en Nules supera los 700 parados, o la emergencia social, que también condiciona la vida de cientos de familias".

"Nosotros, como ya dijimos durante nuestra etapa de gobierno, veríamos con buenos ojos analizar la conveniencia de prolongar durante tantas jornadas estos festejos". Lo sorprendente es, sin embargo, "que quienes también pretendían ajustar estas celebraciones sean ahora los que no solo las mantienen sino que además las financian con un gasto a nuestro entender desproporcionado", ha concluido Mario García.