El PSOE vuelve a las andadas

Autor: Miguel Barrachina Ros, presidente provincial del PPCS

El PSOE se quedó solo al votar en contra de la ampliación de la autovía A7 desde el aeropuerto de Castellón hasta La Jana. Los socialistas rechazaron la iniciativa que desde el Partido Popular presen-tamos en la Comisión de Fomento para que el Gobierno de España agilice la construcción del tramo de autovía gratuita que conectará Vilanova d’Alcolea hasta el límite con Tarragona.

Mariano Rajoy anunció esta construcción en enero de este año cuando visitó Castellón con motivo de la llegada del AVE a nuestra provincia, un proyecto que concluirá los 48 kilómetros de autovía interior de norte a sur, con una inversión europea de 434 millones de euros.

El rechazo del PSOE a ampliar la A7 es la tercera penalización del Gobierno del Doctor Sánchez a Castellón, especialmente contra el norte de nuestra provincia. En los poco más de cien días de go-bierno socialista, se ha aplazado la ampliación de los trenes de cercanías hasta Vinaròs que dejó aprobado el ministro De la Serna y presupuestados los 7,7 millones de euros en las cuentas del Esta-do para paliar su déficit; se oponen a agilizar la construcción de la A7 y en la provincia de Castellón y seguimos pagando el peaje de la autopista que es gratis en Cataluña desde septiembre, rompiendo así el compromiso que dejó el anterior gobierno del PP de bonificar la circulación de vehículos en ambas comunidades autónomas.

Con todo esto, Sánchez emulará el castigo de Zapatero a la provincia de Castellón. Tras recibir de los gobiernos de José María Aznar actuaciones importantes en el barranco de la Bota de la N-232, la A-23 autovía Mudéjar, la autovía de la Plana y los accesos al Puerto, la variante de Nules de la N-340, la N-225 entre Segorbe y la Vall d’Uixó o la llegada del Euromed, con el gobierno socialista del Doctor Sánchez volveremos al periodo más nefasto para Castellón, el de Zapatero, con solo tres obras para nuestra provincia: el almacén del Castor y las dos desaladoras de Orpesa y Moncofa.

Tras el bloqueo de Zapatero a nuestro territorio, llegó la era de Mariano Rajoy con la llegada de la alta velocidad a la provincia de Castellón, las obras de la N-232 para eliminar las más de 60 curvas de Morella, la modernización de la vía férrea Sagunto-Segorbe-Teruel, y los anuncios de la amplia-ción de la A7, la segunda línea de AVE con Madrid. Y ahora, los socialistas heredan un presupuesto que viene con el Corredor Mediterráneo hasta Tarragona y otra actuación entre Vinaròs y Vitoria.

La llegada del Gobierno del PSOE a Madrid supone, como siempre, un bloqueo al crecimiento pro-vincial, cuya esperanza pasa por un gobierno de España presidido por Pablo Casado que devolverá a nuestra tierra la fuerza, las oportunidades y las expectativas de futuro que, como la historia nos ha demostrado, solo los gobiernos del Partido Popular son capaces de atraer.

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