Barrachina: "Este comportamiento es impropio para el progreso y las oportunidades que merece una capital como Valencia"

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El Partido Popular de Castellón ha lamentado hoy la sinrazón del Ayuntamiento de Valencia que ha decidido boicotear las obras de la V-21, principal acceso desde la provincia a la ciudad, pese a que el Ministerio de Fomento ya había licitado la obra. Este acceso lo usan miles de conductores de la provincia de Castellón, sobre todo de la zona sur, y que diariamente acuden a Valencia para trabajar.

Una situación que el portavoz de la comisión de Fomento en el congreso de los Diputados, Miguel Barrachina, ha calificado de "surrealista" y que retrata a la perfección "el estilo reduccionista y de aislamiento de la izquierda". Para el diputado esta decisión de bloquear las obras va en contra de la seguridad vial, del progreso y de la creación de empleo.

"La izquierda no sabe gestionar y este es un claro ejemplo de ello ya que el Ministerio se pone manos a la obra para mejorar esta carretera y ellos deciden bloquear la iniciativa", señala Barrachina. De hecho, el propio Compromís pidió en el Congreso que se llevaran a cabo la obras que ahora boicotean "demostrando que tienen un comportamiento impropio de unos gobernantes y que no merece una ciudad como Valencia".

El portavoz de Fomento advierte que "este en un nuevo ejemplo de que PSOE y Compromís con la pinza de Podemos no defienden los intereses generales de la sociedad valenciana, sino que sólo se centran en sus intereses: adoctrinar de forma constante".